En el marco de la Asamblea General de la OEA que se realiza en La Antigua (Guatemala) se escogerán a los tres vocales que integrarán la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)). Ecuador ha mantenido una ardua labor en las negociaciones. Según la actual embajadora de Ecuador ante la OEA, María Isabel Salvador,  existen varios votos a favor del candidato de nuestro país. A continuación la entrevista realizada por diario El Telégrafo.

¿Cuál es el objetivo de presentar un candidato para que integre la CIDH?

El Ecuador hace tres o cuatro años decidió ir reforzando los espacios de derechos humanos en los distintos organismos multilaterales. Por ello creemos que es necesario poner a un candidato que tenga un objetivo claro de lo que es el cargo, y aparte mostramos el real compromiso y nuestro interés en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH). Han habido una serie de críticas que han hecho creer que Ecuador busca destruir el SIDH, cuando lo que queremos es contribuir y en eso ayudará nuestro representante.

Creemos que la CIDH tiene que ser un espacio de equilibrio en donde no sean siempre los mismos ¿Por qué Erick Roberts?

Es ecuatoriano, especialista en derechos humanos, ha realizado varios posgrados, específicamente en el SIDH, a ello se suma su experiencia laboral porque se ha desempeñado por muchos años como uno de los abogados principales de la Procuraduría General del Estado y está muy al tanto de las bondades del sistema, así como de sus debilidades.

¿Ecuador ha puesto en otras ocasiones candidatos para la CIDH?

El país sí ha tenido un representante, pero solo en una ocasión y obviamente este es un argumento también de peso para que nosotros hallamos decidido proponer un nombre. Creemos que la CIDH tiene que ser un espacio de equilibrio en donde no sean siempre los mismos países los que estén presentes, sino que haya una especie de rotación que permita a todos ser parte en algún momento del sistema y de la comisión. Hay países que tienen comisionados presentes por más de 40, 38 y 25 años; de alguna forma se han adueñado de la Comisión.

¿Cómo se ha desarrollado la campaña?

Esto es todo un proceso que viene desde abril y desde ese momento se han realizado una serie de acciones. El candidato visitó cada una de las misiones de los países miembros de la OEA explicando sus proyectos. Adicionalmente, existe un despliegue diplomático para difundir los datos del candidato; también ha acompañado al Canciller en sus giras.

¿A ese puesto también aspiran representantes de Perú, Colombia, Brasil. Existe un cálculo de la acogida a Roberts?

Definitivamente, todo esto es una gestión que se hace y hay que ir evaluándolo. Primero, el candidato es bueno y, segundo, Ecuador es un país con un rol de liderazgo que busca la transformación y fortalecimiento de la Comisión y eso permite que haya un reconocimiento de algunos países y que a través del voto, de alguna forma puedan expresarlo. Tenemos varias confirmaciones, unas por intercambio de votos, es decir que si un país tiene un candidato para un puesto aunque sea de otro organismo y nosotros queremos un apoyo podemos comprometer el voto en otras elecciones.

¿Cuáles son esos países?

Yo preferiría no decirlo porque de pronto se podría generar un nivel de suspicacia, pero tenemos por ejemplo: el apoyo de los integrantes del ALBA y otros latinoamericanos. Creo que tenemos unas buenas posibilidades.

¿Estas elecciones presentan alguna particularidad?

Sí, es la primera vez en la historia que se presentan tantos candidatos para ocupar los puestos, lo que significa claramente que hay mucho interés. Además, cinco de los seis candidatos son Estados parte de la Convención Iberoamericana; esperamos que se mantenga el compromiso que se adquirió en Guayaquil de que votemos por candidatos de los Estados Parte.

Lo importante es que Ecuador posicionó la idea de que la sede debe estar en un Estado parteEE.UU. es el único país que tiene un candidato a la CIDH que no ha ratificado el Pacto de San José, ¿usted cree que los países respetarán ese compromiso?

Debemos tener en cuenta que los países son soberanos en sus decisiones. Lo que se decidió en Guayaquil es que preferentemente no se votará por un Estado que no sea parte, pero hay compromisos adquiridos previamente. No es fácil la negociación, están países fuertes.

Uno de los temas que se ha tratado es el de cambio de sede, ¿se ha avanzado?

Es un proceso que puede ser largo. Pero lo importante es que Ecuador ha posicionado la idea de que la sede debe estar en un Estado Parte; antes nadie había cuestionado esa situación. Es cuestión de igualdad, que es un derecho universal. No es una idea loca, hay muchos países que han apoyado, pero es un proceso que requiere una reforma al estatuto, para lo que se necesita la mitad más uno de los integrantes de la OEA.

CINCO ELECCIONES SE REALIZARÁN EN GUATEMALA

En el marco de la Asamblea General que se realiza en Guatemala hasta el 6 de junio, cuyo eje central es el combate a las drogas, se realizarán cinco elecciones a diferentes entidades adjuntas al organismo.

Las vacantes están en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Comité Jurídico Interamericano, Centro de Estudios de Justicia de las Américas, Junta de Auditores Externos y en el Tribunal Administrativo. De estas la más representativa es la Comisión.

El secretario ejecutivo del bloque, José Miguel Insulza, llegó al país el pasado sábado para participar en varios eventos y entrevistarse con Otto Pérez Molina, presidente guatemalteco. Ayer en un hotel de La Antigua se realizó la rueda de prensa previa al evento que inicia hoy.

Adicionalmente, durante el Consejo Permanente que se realizó en la sede del organismo en Estados Unidos, el delegado de Guatemala señaló que esta visita será de ayuda para diversificar la oferta turística del país.

Guatemala ha expresado en reiteradas ocasiones que el ofrecer su territorio para la Asamblea de la OEA es una forma de ratificar su compromiso con el Sistema Interamericano.

SALVADOR PASA CONSEJO EN GALÁPAGOS

La cita en Guatemala será el último evento de María Isabel Salvador como embajadora de Ecuador ante la OEA. Así lo anunció el presidente Rafael Correa durante el enlace sabatino 324 que se realizó en Pichincha.

El mandatario dijo que se necesita reforzar las cosas en Galápagos y por ello se ha designado a Salvador como la nueva representante del Ejecutivo ante el Consejo de Gobierno de las islas.

Este ente es un sistema de manejo especial porque busca preservar la biodiversidad y por ello es indispensable que se respeten las políticas establecidas.

Recordó que anteriormente las islas fueron declaradas en riesgo por la UNESCO, y aunque “ya nos sacaron de la lista de riesgo, falta muchísimo por hacer”.

El Jefe de Estado sostuvo que, pese a que el Gobierno ha ejecutado obras en la región Insular, aún existe mucho desorden, abuso, anarquía, falta de política. Allí, inclusive el Gobernador ejerce también la Presidencia del Gobierno de Galápagos, lo cual no es lo más óptimo. “Su misión fundamental será la de emitir políticas y hacer cumplir las normas que emite el Consejo de Gobierno de Galápagos”, comentó/El Telégrafo