El Telégrafo llega a rincones del país donde la prensa mercantilista no
El diario público El Telégrafo, llega a rincones de la patria donde ningún otro rotativo nacional alcanza, cumpliendo con la meta de democratizar y masificar la información pública.
Así lo confirmó Vicente Arellano, gerente de Circulación de Editogran, la editora que produce entre otros productos el mencionado diario, y que es la más moderna de América Latina. “No hay un solo ejemplar de El Comercio o de El Universo en Sigsig, en Chordeleg, en Gualaceo, en Paute, pero El Telégrafo y el PP están ahí”, explicó.
La rotativa de Editores Nacionales Gráficos trabaja con un turno de 24/7 (24 horas diarias, siete días a la semana), ampliando su labor a la impresión de libros, periódicos, textos escolares y otros productos. 75 mil periódicos por hora es la capacidad que la rotativa de Editogran alcanza, en excelente calidad.
Según el gerente de Producción actualmente la planta produce El Telégrafo, PP el Verdadero, El Quiteño, El Ciudadano y La Verdad. Además elabora alrededor de entre 15 y 17 millones de textos escolares al año.
Según el asesor general de la empresa, José Orús, la desesperación por la pérdida de publicidad y de lectores obliga a ciertos rotativos mercantilistas a arremeter contra el medio público, que además ha sido premiado internacionalmente, mediante reconocimientos que estos medios han tardado decenas de años en obtener.
Editogran es una compañía anónima, cuyo capital suscrito pertenece en un porcentaje mayor al 50% al Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información. Su giro empresarial debe someterse a las disposiciones de la Ley de Compañías, del Código de Comercio, del Código Civil, del de Trabajo y en general al régimen legal aplicable a las personas jurídicas de derecho penal, para de esta forma lograr altos índices de eficiencia, productividad y competitividad en el mercado, que le permitirán –entre otras cosas- estar a la altura de las empresas similares de la región. /SD El Ciudadano